El
2013 fue el año de redefinición de proyectos para el mercado de redes en México.
El
mercado de redes empresariales en México representa cerca de $387.24 millones
de dólares.
México
continua siendo el segundo país más grande en el mercado de redes empresarial
en América Latina, representando aproximadamente $387.24 millones de dólares al
cierre del 2013 para el mercado de routers, switches y WLAN, declaró IDC, la
principal firma de inteligencia de mercado, servicios de consultoría y
conferencias para los mercados de Tecnologías de la Información y
Telecomunicaciones.
“En
los últimos tres años hemos observado la consolidación del mercado de las TIC
en México como uno de los mercados más dinámicos y para ello basta resaltar que
México continua siendo el segundo país más grande en el mercado de redes
empresarial en América Latina, representando aproximadamente $387.24 millones
de dólares al cierre del 2013 para el mercado de routers, switches y WLAN”
declaró Iván Maldonado, Analista asociado de telecomunicaciones para IDC
México.
Por su
parte operadores y empresas, se enfrentan a mayores desafíos internos para
cumplir con la demanda de mayor ancho de banda, alojamiento de datos,
transmisión de vídeo, desarrollo de aplicaciones, voz IP, entre otras, como
resultado tenemos mayores flujos de datos a través de la red por lo que permanecer en la primera línea competitiva
y vanguardista se ha traducido en una mayor demanda de infraestructura de
equipos de redes.
Para
el mercado de routers observamos contracciones en toda la región, donde se
espera que México cierre el año con un decrecimiento del 26% respecto al año
anterior; esto como resultado de la redefinición de proyectos por parte del
gobierno federal y las reformas constitucionales, lo que ha provocado cautela
en las inversiones de los operadores hasta que la reforma de telecomunicaciones
no quede concluida en su totalidad con la introducción de leyes secundarias
para su operación.
En el
mercado de switches se espera un crecimiento del 4% al cierre del 2013, debido
a un menor precio promedio en el número de puertos, originado por la competida
oferta de switches en el mercado y los pocos proyectos licitados en este año.
En su segmentación la capa 3 representa el 77% del mercado con velocidades de
100MB a 40GB, para las cuales 10GB y 40GB representan la transición más
importante con el 33% del mercado. El acelerador más importante para esta
tecnología continua siendo el Data Center donde principalmente se están
desplegando redes de 10G y 40G buscando con ello garantizar la escalabilidad de
la red.
Para
el mercado WLAN se estima un crecimiento del 3% al cierre del 2013, ya que la
sustitución de los controladores con ofertas de nube o equipos unificados que
unen funcionalidades adicionales como la seguridad y conmutación, se ha
traducido en precios más bajos que han impactado a los fabricantes en el
mercado. Las verticales que sobresalen en la implementación de estas soluciones
son educación, salud y hotelería. Por otro lado, la penetración del estándar
811.n se consolida con una cuota de mercado del 71% y futura una migración al
estándar 811ac en los próximos años.
¿Qué
esperar para el 2014?
•
Aumentará la implementación de WLAN para apoyar los objetivos del gobierno. De
acuerdo con la Estrategia Nacional Digital, lo que toca a educación se centrará
en proporcionar acceso a los estudiantes, mientras que salud asegurará la
conectividad entre el personal.
• Se
espera un crecimiento significativo en el segundo semestre del 2014 en
telecomunicaciones. Actualmente los inversores en este sector están siendo
reservados, esperando que la reforma de Telecomunicaciones concluya su
aplicación, por lo que se verá una recuperación en el segundo semestre del
2014.
• Un
mayor despliegue de infraestructura de switches y routers, debido a la enorme
demanda de datos que generan los dispositivos móviles, lo cual requiere mayor
despliegue de ancho de banda tanto en el segmento empresarial como en los
operadores
•
Redes con accesos más seguros mediante el despliegue de soluciones de
seguridad. La mayor apertura por parte de las organizaciones para acceder a su
información remotamente demandará mayor seguridad en las redes, lo que se
convertirá en una inversión prioritaria para las organizaciones
