(EFE). El fabricante de equipos de telecomunicaciones sueco Ericsson planea cerrar el resto de su producción en Suecia y despedir a unos 3,000 empleados, informó el periódico "Svenska Dagbladet" el pasado 22 de septiembre.
La decisión afectaría a las fábricas de Borås y Kumla, las últimas que la compañía tiene en este país escandinavo y que pertenecen a la división de productos de redes, la principal de la firma sueca.
"Acabaremos con una época de 140 años, lo que supondría los principales recortes de empleados hechos nunca en Suecia", consta en un documento interno de la dirección de la compañía difundido por este diario. Ericsson tiene una plantilla de unos 116,000 trabajadores, de los que cerca de un 14% están en Suecia.
El fabricante sueco, que no ha confirmado los planes sobre su producción, negocia desde hace semanas con los sindicatos un nuevo plan de recortes tras los impulsados en los últimos años.
Las críticas sobre el programa de bonificaciones a sus directivos y el reparto de dividendos a sus inversores han perseguido recientemente a Ericsson, que hace unos meses prescindió de su director ejecutivo, Hans Vestberg.
Ericsson tuvo un beneficio neto de 13.673 millones de coronas suecas (1,472 millones de euros) en 2015, un 23% más que el año anterior.