SEÚL (Reuters) - Samsung Electronics planea invertir 116.000 millones de dólares en procesadores no relacionados con memoria hasta el 2030, a fin de reducir su dependencia de los chip de memoria volátil que requieren energía para mantenerse y desarrollar procesadores para autos autónomos y dispositivos con inteligencia artificial.
El plan destaca las ambiciones de la firma surcoreana de desafiar a rivales más grandes, como la taiwanesa TSMC en contratos de manufactura y Qualcomm Inc en chips móviles, en momentos en que el mercado de los procesadores de memoria se contrae con fuerza después de años de un auge sin precedente.
Los fabricantes globales de semiconductores están compitiendo con fuerza por producir chips capaces de respaldar nuevas tecnologías como la quinta generación de redes móviles(5G), autos conectados e inteligencia artificial.
En marzo, el fabricante de chip Nvidia Corp acordó comprar al diseñador israelí Mellanox Technologies Ltd por 6.800 millones de dólares, superando a su rival Intel Corp en un pacto que ayudará a Nvidia a impulsar sus centros de datos y el negocio de inteligencia artificial.
Samsung, que ha expandido su negocio de chip ampliamente a través de crecimiento orgánico, dijo el miércoles que el gasto de 133 billones de wones (116.000 millones de dólares) comprenderá 73 billones de wones para investigación y desarrollo y 60 billones de wones para infraestructura.
“Se espera que el plan de inversiones ayude a la firma a alcanzar su objetivo de convertirse en el líder mundial no sólo en simconductores de memoria sino también en chips de lógica para el 2030”, dijo la empresa en un comunicado.
Aunque Samsung no informa el detalle de sus inversiones en la división de semiconductores, analistas consideran que más de la mitad de su gasto de capital total usualmente va hacia chips de memoria.
En el 2018, Samsung destinó 29,4 billones de wones a gastos de capital y cuatro quintos de su presupuesto fue a la división de semiconductores en donde los chip de memoria generaron un 96 por ciento de la ganancia operacional. Reuters