MENLO PARK, California, EE.UU. (AP) — El que fuera “supervisor adulto” de Google se acerca al retiro. Eric Schmidt, quien ocupó el puesto de director general en 2001 tres años después de que los inversionistas exigieran un liderazgo más maduro para el gigante tecnológico de rápido crecimiento, dejará en enero el puesto de presidente ejecutivo de Alphabet, la empresa matriz de Google.
El multimillonario de 62 años se convertirá en consejero técnico y seguirá siendo parte de la junta directiva de la compañía que fue creada para arropar a Google y a sus innovadoras empresas subsidiarias en 2015.
Schmidt, un ex ingeniero con altos puestos ejecutivos en Sun Microsystems Inc. y Novell Inc., quitó las riendas del gigantesco motor de búsquedas en 2001 a los fundadores Larry Page y Sergey Brin, brillantes técnicamente hablando, pero criticados por su inexperiencia gerencial.
Page fue restaurado como director general en 2011, anunciado en una medida sorpresiva mientras la compañía reportaba sus ganancias trimestrales. Schmidt dijo entonces “creo que Larry está listo” para ser director general y agregó, “es hora de que él tenga oportunidad de dirigir esto”.
“La estructura de Alphabet funciona bien, y Google y las otras apuestas prosperan”, dijo Schmidt en una declaración el jueves. “En años recientes, he pasado gran parte de mi tiempo en temas de ciencia y tecnología, y filantropía, y planeo expandir ese trabajo”.
El organismo clave para la filantropía ha sido la fundación The Schmidt Family, fundada por Schmidt y su esposa Wendy en 2006.
Según las más recientes declaraciones de apoderados de abril, Schmidt tiene acciones con un valor de 4.900 millones de dólares, y ha mantenido 5,6% del control de votos en la compañía. Page y Brin controlan en conjunto una mayoría de los votos con acciones cada uno que cuadruplican ese valor. Una vocera dijo que Schmidt no vendería acciones como parte de la transición.
En octubre 2015, Google lanzó una nueva estructura que hizo que Alphabet Inc. fuera la empresa matriz de Google y las empresas asociadas. Algunas de esas “otras apuestas” incluyen los autos sin conductor, termostatos inteligentes y globos que proveen servicios de internet. Schmidt