miércoles, 3 de agosto de 2016

México crece 1.28% de penetración de banda ancha en 2015: OCDE

3 de agosto, 2016 (mediatelecom). Aunque México exhibe niveles relativamente altos en uso de banda ancha móvil, el mercado de banda ancha fija aún se mantiene rezagado con respecto al resto de países de la OCDE. Según las últimas cifras de la organización, México creció 1.28 por ciento en términos de penetración de banda ancha hasta diciembre de 2015, por debajo del promedio de 3.38 por ciento.

La OCDE revela que México reportó una tasa de penetración de banda ancha fija de 12.05 conexiones por cada 100 habitantes, la más baja de entre todos los países miembros hasta el cierre de 2015. A México le superan Turquía (12.3 conexiones) y Chile (15.1 conexiones), a la vez que se encuentra lejos de los líderes Suiza (51.9 conexiones), Dinamarca (42.4 conexiones) y Países Bajos (41.3 conexiones).

Colombia, que inició el proceso de ingreso a la OCDE también comienza a figurar en los datos de la organización. Hasta diciembre de 2015, exhibía 11.65 conexiones por cada 100 habitantes, pese a los esfuerzos del plan Vive Digital.

El promedio de penetración de banda ancha fija de países miembros de la OCDE es de 29.05 conexiones por cada 100 habitantes.

En cuanto a banda ancha móvil, hasta diciembre de 2015, en México había 63.07 millones de conexiones, lo que representa una penetración de 52.1 conexiones por cada 100 habitantes, según el reporte de la OCDE. Este nivel también se encuentra por detrás del promedio de la OCDE en 90.3 conexiones por cada 100 habitantes.

En cuanto a países de desarrollo similar a México, Chile lo supera levemente con una penetración de 55.74 suscripciones por cada 100 habitantes, mientras que Colombia se mantiene rezagada con 43.03 conexiones.

Al considerar la baja en precios, la disponibilidad de dispositivos y la cobertura y avance de las redes, la banda ancha móvil se ha convertido en el principal medio de acceso en países de la OCDE, al igual que en el resto del mundo. La tecnología ha permitido que las personas en niveles económicos más vulnerables puedan acceder de una manera relativamente barata a nuevos servicios digitales.